jueves, 27 de noviembre de 2014

Pese a lo que se puede creer, el procedimiento no es complicado.
Cecilia Arias Cárdenas
caarias@grupoepensa.pe
Ojo.pe.-  Según la Organización Mundial de la Salud, las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte a nivel mundial, por ello, en muchos países de América y Europa existe la obligación de contar con desfibriladores en lugares públicos y privados como empresas, parques, colegios, municipios, hoteles, entre otros; norma aún no reglamentada en nuestro país. Salud en Casa,

Para Marisela Díaz, directora del Proyecto Salvavidas Perú, es importante que las empresas y espacios públicos y privados cuenten con un espacio cardioprotegido que consiste en tres puntos básicos: “adquisición de un desfibrilación, instalación visible (así como un extintor) y personal capacitado que pueda realizar la técnica de reanimación cardiopulmonar (RCP)”, explica Díaz.
Para el doctor Jorge Vigo, presidente del Consejo Peruano de Reanimación (CPR), una persona sufre de muerte súbita o paro cardiorrespiratorio cuando pierde el conocimiento (se desmaya de un momento a otro), no responde y su respiración es lenta (como cuando el pez es sacado del agua).
Ante ello, se debe recostar a la persona en el piso boca arriba o en alguna superficie dura, llamar al 106 y pedir que traigan un desfibrilador e iniciar la reanimación.
“Se debe ubicar el centro del torax (intersección de una línea imaginaria que viene del mentón hasta la altura de los pechos), ahí poner la mano dominante, la otra mano encima y entrecruzar los dedos. Estirar los codos y con el peso de nuestro cuerpo subir y bajar como si estuviéramos haciendo abdominales arrodillados”, señala el especialista.
Hay que tener cuidado de no hacer las compresiones muy fuertes porque se pueden romper las costillas. 
Algo más
El Proyecto Salvavidas Perú ofrece a las empresas “Pulseras Salvavidas” gratuitas para que las vendan a S/. 5 y con el fondo adquieran un desfibrilador y la capacitación.
Cifra
30 Compresiones seguidas se deben hacer y luego dos respiraciones boca a boca.
Frase
“Mientras la persona reciba reanimación cardiopulmonar (RCP), no está muerta”, Jorge Vigo
Presidente del CPR

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