domingo, 4 de marzo de 2018


En los colegios en caso de requerirlo se deben instalar toldos a fin de evitar los rayos solares que impactan en los niños, además deben utilizar gorros y bloqueadores solares.

Salud en Casa.- Ante la inclemencia del calor, los directores y maestros de los centros educativos deben velar por la salud de los estudiantes quienes permanecen mucho tiempo en el patio por actividades o eventos diversos.


“Los pequeños además de sufrir el golpe de calor que ocasiona dolores de cabeza, insolación  y desmayos; pueden ser víctimas de quemaduras por la sobrexposición solar, sobre todo aquellos que poseen piel blanca, no debiendo estar más de 15 minutos, y aquellos de piel oscura máximo 20 minutos, en dependencia dl horario de recreo. Hay que recordar que la radiación ultravioleta es mayor en horario de 10 am a 4 pm. Que coincide con el horario de descanso de los niños”, indicó el Dr. Víctor Cabrera Serna, médico general del Portal Salud en Casa.
De acuerdo con la especialista, en los colegios se deben instalar toldos a fin de evitar los rayos solares que impactan en los niños, además deben utilizar gorros y bloqueadores solares. Aplicándose 20 minutos antes de ir a su centro  o cuando salga al recreo. “E incluso los padres de familia deben supervisar que sus uniformes no sean de nylon, ya que  protegen  y más bien generan calor”.  
“Es importante mantener una buena hidratación en los pequeños y que las loncheras contengan alimentos frescos y saludables. En los colegios la relevancia también recae en mantener una buena ventilación que se logra con mantener ventanas abiertas y el uso de ventiladores que faciliten la circulación del aire”, precisó.  
Según Víctor Cabrera, precisa que en la hora de educación física y cuando realicen prácticas en la piscina, deben tener un ambiente techado, e igualmente aplicarse bloqueador cada media hora y más aún  cuando ingresa y sale del agua.
“Los más propensos a ‘golpes de calor’ son los niños menores de dos años, cuyos cuerpos no disponen de mecanismos para manejar el calor, al igual que los adultos mayores,  que se deshidratan con facilidad. Presentando fiebre, irritabilidad, dificultad para respirar y diarreas”.
“Si estamos al lado de una víctima de este problema, lo recomendable es abrir las ventanas y colocarle compresas de agua fría (no helada) sobre la piel. De mantener el estado de conciencia estable, puede darle bebidas frescas. Recuerde que de mantener el estado de decaimiento o empeoramiento del cuadro, llevarlo hacia el establecimiento de salud más cercano, manteniendo las medidas anteriores indicadas. Y al momento de llevarlo hacia un establecimiento de salud, hay que tener a la mano un recipiente con agua y toalla para seguir refrescando su cuerpo hasta que reciba atención médica”.

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