jueves, 24 de mayo de 2018

La tasa más baja en Latinoamérica. Hay 6 mil pacientes que necesitan corazón, riñones, hígado, piel, córneas o pulmones.

Por Eduardo Salinas 

Diario La República.- Han pasado dos meses de la muerte de la pequeña Mía Nicolle, de tan solo 4 años. Ella sufrió un accidente y producto de ese fatídico hecho sufrió una muerte cerebral durante unos días, por lo que su familia decidió donar sus órganos antes de que perdiera la vida.

Este fue un gesto muy valioso porque hoy, en el Perú, la tasa de donantes de órganos y tejidos solo llega a 1,6 por cada millón de habitantes, una de las más bajas en Latinoamérica, lo cual ocasiona que muchos pacientes con enfermedades crónicas esperen por largo tiempo un trasplante.
Según Luz Meza Vargas, directora de Donaciones, Trasplantes y Banco de Sangre del Ministerio de Salud, en la actualidad hay una lista de 6 mil pacientes que necesitan órganos como un corazón, riñones, hígado, de tejidos, de corneas (parte frontal transparente del ojo) y de piel.
"En esta situación pedimos a los familiares respetar la decisión del donante y permitir que más pacientes puedan tener una oportunidad de vivir", expresó la doctora Meza.
El padre de la niña mencionada al inicio, Ever Sotomayor, extraña mucho a su hija y espera que esta iniciativa la tengan otras familias para poder ayudar a más pacientes que necesitan órganos. Además vive en constante lucha para exigir justicia por los responsables que ocasionaron la muerte de su pequeña.
"María del Pilar Jáuregui se estacionó en la Panamericana Surcuando la mototaxi, donde venía mi hija con su madre, chocó violentamente y ella salió volando y cayó a la carretera. La señora no se hizo cargo, solo arregló con el mototaxista. La justicia ya la está buscando, pero no se pone a derecho", afirmó.
El padre cuenta que, tras la intervención los médicos, le propusieron que donen los órganos de la niña, ya que iba a perder la vida. "Mi hija fue cariñosa. Todos los niños eran sus amiguitos, así era mi hija. En su nombre, donamos su hígado, riñones, pulmón y el páncreas", contó afligido.

Nueva vida

El niño Wilson Daniel, de 8 años, fue trasplantado del corazón el pasado 10 de abril. Gracias a esa intervención, se encuentra recuperado y agradeció a su donante, una niña piurana.
La cirugía se realizó en el Instituto Nacional Cardiovascular (Incor) con un gran despliegue de médicos y profesionales de Essalud, que ayudaron en todo momento. Hay que apoyar esta causa.
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