El paciente que ha tenido un infarto siempre debe realizarse una evaluación
médica de hipertensión arterial, hiperlipidemia y evitar el tabaquismo.
RPP Noticias.- Se ha demostrado que el paciente cardiaco que recibe rehabilitación
física precozmente posterior a un infarto al miocardio reduce
en 25 por ciento el riesgo de mortalidad y en 30 por ciento de desarrollar
problemas cardiacos indicó a Salud en RPP el médico deportólogo José
Mendoza.
Explicó que existen 3 fases para el inicio de la actividad física en
personas que han tenido infarto al miocardio o crisis aguda de angina de
pecho:
1- Clasificación de la población: 48 horas posteriores a un
infarto al miocardio para ello se realiza una prueba de esfuerzo,
electrocardiograma, ecocardiografía dinámico con medición de flujos.
2- Prescripción del ejercicio: según los días posteriores a
un infarto al miocardio, el estado de salud, etc.se inicia con estiramiento,
calentamiento, caminando, etc.
3- Mantenimiento: de los logros obtenidos en las fase 1 y 2,
para mejorar la calidad de vida de la persona.
El paciente que ha tenido un infarto siempre debe realizarse una
evaluación médica de hipertensión arterial, hiperlipidemia y evitar el
tabaquismo.
El tiempo, tipo y frecuencia del ejercicio debe ser supervisada por
un médico deportólogo en coordinación con el cardiólogo.
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