Salud en Casa.- Los entrenamientos de los futbolistas profesionales
exigen los mismos niveles de presión que cualquier competencia y su preparación
debe considerar aspectos emocionales y nutricionales para garantizar un alto
rendimiento, sostuvo Luis Olavarría, coordinador de Psicología en la
Universidad Privada del Norte (UPN).
Según el especialista, es recomendable un
entrenamiento que permita la adaptación del deportista a un régimen riguroso de
trabajo, tanto a nivel individual, como colectivo, considerando que la conducta
de cada jugador cambia de acuerdo al entorno donde se encuentre. “Si los
entrenamientos se efectúan bajo estímulos similares a los que se enfrentarán en
la competencia, tendrán mayor control psíquico y lograrán mejores resultados en
la cancha”, expresó.
Olavarría se refirió al caso peruano indicando
que es muy probable que la ausencia temporal de Paolo Guerrero, líder del
equipo de fútbol, en la última parte de los encuentros de la eliminatoria, haya
favorecido emocionalmente el control del estrés y ansiedad de los jugadores porque
adelantarse a los hechos es considerada la mejor terapia psicológica para un
deportista.
“En UPN, recomendamos prepararse emocionalmente
para enfrentar cualquier tipo de riesgo o percance. Apoyamos e incentivamos el
deporte constantemente en nuestros estudiantes, por ejemplo, la Selección Deportiva
de Fútbol de la institución está realizando un excelente trabajo en la Liga
Universitaria de División Ascenso 2018-1, organizada por la Federación
Deportiva Universitaria del Perú (FEDUP)”, dijo Luis Olavarría.
La preparación integral de un jugador de fútbol recoge también el
aspecto alimenticio. Jhon Campomanes, docente de la carrera de Nutrición y
Dietética de la UPN, explicó que respetar la información de lo que deben
consumir influye en su desenvolvimiento y es necesario considerarlo para lograr excelentes resultados.
“Las necesidades varían conforme a las
características físicas del jugador, posición en la cancha, actividades que realice
y tipo de entrenamiento. Todos los competidores deben estar preparados tanto a
nivel nutritivo como psicológico, para evitar descompensaciones”, indicó.
El docente de la UPN agregó que es recomendable
los alimentos ricos en carbohidratos, proteínas, hierro, vitaminas y antioxidantes.
“Deben consumir cereales como arroz, quinua y trigo, para asegurar el glucógeno
en los músculos; carnes como pollo, pavita, res y pescado, porque favorecen la
recuperación muscular; vísceras como hígado, corazón y bazo, para la
acumulación de hemoglobina; y, algunas frutas y verduras”.
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