DEPRESIÓN: ¿CÓMO AYUDAR A UN PACIENTE QUE SE QUEDA EN CASA?

Salud en Casa.- La depresión es un trastorno de salud mental que se caracteriza por la aparición de tristeza muy profunda, sentimientos de culpa o falta de autoestima, falta de concentración, trastornos del sueño, pérdida de interés en actividades cotidianas, entre otros posibles síntomas. Según la Dirección de Salud Mental del Ministerio de Salud (Minsa), en el 2019, 1 millón 700 mil peruanos padecían de depresión, cifra que ha ido en aumento durante los últimos meses del año en curso.

 

Y es que, vivir con un paciente con depresión requiere de un mayor cuidado y monitoreo por parte de la pareja o los familiares. Datos del Instituto Nacional de Salud Mental (INSM), indican que cada 22 minutos una persona intenta suicidarse debido a este trastorno mental, lo cual pone en alerta a quienes conviven con un paciente en casa.

 

Debido a ello, Alex Huambachano, gerente de canales de Ezviz brinda algunas recomendaciones ahora que muchas personas están retornando a sus labores o saliendo de casa por distintos motivos:

 

Seguimiento profesional.

Si bien es cierto que todo ser querido busca el bienestar de quien está padeciendo de depresión, el acompañamiento y los consejos no profesionales no bastarán para controlar o curar dicho trastorno. Es importante que se siga un control constante con el profesional a cargo o se busque orientación médica.

 

Además, es sumamente fundamental el acompañamiento, ya que, en ocasiones algunas de las personas que atraviesan por este trastorno no aceptan su situación y rechazan todo tipo de ayuda.

 

Aprovechar la tecnología para monitorear al paciente.

Un gran porcentaje de la población está retornando a sus oficinas, ante ello, surge la necesidad de mantenerse conectados con sus familiares o parejas que están diagnosticados de depresión. Más allá de una llamada es vital monitorear al paciente, esto se puede lograr mediante la instalación de cámaras de video vigilancia.

 

De esta manera, se podrá brindar ayuda necesaria si se observa algún comportamiento inusual, asimismo, el/la “cuidador/a” puede enviar mensajes de soporte gracias a la función de audio de doble vía que muchos de estos productos ofrecen. Así, el/la paciente se sentirá acompañado/a.

 

Reforzar la escucha y optimizar la comunicación.

 

A pesar de tener la mejor voluntad para ayudar al paciente, sobrecargarlo/a de mensajes positivos puede resultar incluso contraproducente y generar un mayor malestar en la persona. Por eso, es importante mantener un rol de escucha activa, orientando la comunicación hacia buenas prácticas y hacia comentarios que refuercen sus puntos fuertes. Es vital que sus círculos más cercanos sean capaces de resaltar sus capacidades o éxitos.