Salud en Casa .- El retorno a la vida universitaria es exigente y representa toda una experiencia llena de retos y competencias para las personas. Esto, sumado a los protocolos de bioseguridad por la pandemia del COVID-19, puede causar mucha ansiedad en los estudiantes. En el desarrollo del ser humano, la universidad es considerada por algunas personas como una etapa fundamental, que, si no se maneja de la manera adecuada, llega a afectar la salud y el rendimiento académico.
Frente a ello, la licenciada Fabiana Paz Pacheco, egresada de la Universidad César Vallejo, presenta algunas recomendaciones para poner en práctica y sobrellevar de la mejor manera esta etapa tan importante:
- Organización: Es importante tener en cuenta que sin la organización es probable que se dejen pendientes para última hora o se acumulen los trabajos, lo cual genera presión y despierta la ansiedad. Lo aconsejable es empezar a usar planners diarios y mensuales, donde se puede colocar cada actividad a realizar y facilitar así el cumplimiento de metas.
- Descanso: Recordar que el descanso ayuda a retener mucho mejor lo aprendido y garantiza una mejor atención a la hora de estudiar, por lo que se recomienda que los adultos descansen entre 7 y 8 horas cada noche, para no afectar su rendimiento.
- Crear una red de apoyo: Si la presencia de nuevos retos como tareas, trabajos, exámenes, etc. generan algunos de los síntomas típicos de la ansiedad, lo ideal es apoyarse en personas de confianza, así como crear o unirse a grupos de estudio que compartan metas y objetivos.
- No sobrepienses: La angustia y el miedo a las actividades nuevas como exámenes o exposiciones podrían generar demasiados pensamientos, muchos de ellos negativos y fatalistas. Es importante tener en cuenta que esto solo complicaría el desempeño académico. Por ello, las personas deben considerar una nueva regla en su vida: no asumir situaciones y, si en caso sucede, no esperar lo peor de ellas.
- Dedícate tiempo: Es importante realizar actividades que nutran, relajen y den el espacio necesario para liberar el estrés, tales como realizar ejercicios al aire libre, asistir a reuniones con amistades bajo contexto de ocio, aprender a realizar ejercicios de respiración para eliminar la tensión, hacer yoga, baile, entre otros. El tomarse un tiempo para sí mismo permitirá hacer más que estudiar y equilibrará el estilo de vida.
Finalmente, si a pesar de haber practicado estas recomendaciones los síntomas persisten más allá de lo apropiado, la recomendación final es visitar a un psicólogo para poder tratar la situación de forma profesional.
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