sábado, 7 de septiembre de 2024

     El Día Mundial de la Fisioterapia es un evento mundial dedicado a reconocer el importante impacto que tienen los fisioterapeutas en la salud y la calidad de vida de las personas.





Salud e
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 Casa.- En un mundo cambiante y siempre en movimiento resulta irónico que los estilos de vida sedentarios sean cada vez más comunes, y por ende las consecuencias sean recurrentes en la población. La carrera profesional de Fisioterapia o Terapia física y Rehabilitación presenta alternativas prácticas para prevenir y controlar los problemas musculoesqueléticos, el dolor crónico y otras afecciones que afectan a las personas quienes ven alterada su calidad de vida debido a los impedimentos al realizar sus actividades de la vida diaria. Este enfoque holístico de la atención en la Fisioterapia permite a las personas tomar el control de su bienestar físico Y por ende de su salud integral.




Para ayudar a permanecer activo, saludable y mantener una movilidad óptima, la Mg. Ana Espinoza Okamoto, docente gestora de la carrera de Terapia Física y Rehabilitación de la Universidad Privada del Norte (UPN) brinda información de estrategias simples pero efectivas que están diseñadas para integrarse perfectamente en su rutina diaria, promoviendo el bienestar a largo plazo y previniendo problemas físicos comunes:



  1. Integra una actividad física en tu rutina diaria: Incorpore actividad física a su rutina diaria con ejercicios que lo mantengan activo y con energía. Intente hacer al menos 30 minutos de ejercicio moderado cada día, que incluyan actividades como caminar, estirarse o andar en bicicleta. Además, fortalezca su núcleo con ejercicios específicos para mejorar la estabilidad, el equilibrio y la salud física general. Un núcleo fuerte sostiene su columna vertebral, mejora la postura y reduce el riesgo de lesiones.

 

  1. Conciencia de la postura: Una buena postura ayuda a distribuir el peso corporal de manera uniforme, lo que reduce la tensión en los músculos y las articulaciones y previene el malestar o las lesiones. Por ello, tómate un momento para evaluar tu postura habitual a lo largo del día, tratando de mantener la espalda recta y los hombros relajados, ya sea que estés sentado, de pie o en movimiento y asegúrate de que tu estación de trabajo esté configurada para favorecer una buena postura. Una mala postura puede provocar dolor y malestar crónicos, especialmente en la espalda y el cuello.

 

  1. Estírate con regularidad: Incorpora estiramientos a tu rutina, toma 5 o 10 minutos de pausas activas establecidas en el horario de tus labores cotidianas para recuperar la oxigenación y movilidad, mantener la flexibilidad y reducir la tensión muscular. Concéntrate en las áreas clave: estira el cuello para aliviar la rigidez, los hombros para aliviar la tensión de actividades como escribir a máquina y la parte superior de la espalda para contrarrestar una mala postura.

 

  1. Escucha a tu cuerpo: Presta atención a las señales de malestar o dolor. Una intervención temprana puede evitar que problemas menores se conviertan en afecciones crónicas. Si experimentas dolor persistente, crujidos constantes, o limitación al movimiento consulta a un fisioterapeuta para obtener asesoramiento personalizado.

“La fisioterapia es más que una mera rehabilitación; se trata de empoderar a las personas para que asuman un papel activo en su salud. Al adoptar hábitos simples como el ejercicio regular y el cuidado de la postura, las personas pueden mejorar significativamente su calidad de vida”, afirmó la especialista de UPN.



En los últimos años, la demanda de fisioterapia ha aumentado, debido, principalmente al aumento de las enfermedades crónicas y una mayor demanda en la atención preventiva. Los fisioterapeutas trabajan en diversos entornos, incluidos hospitales, clínicas ambulatorias, instalaciones deportivas, centros de salud comunitarios, y escuelas. La fisioterapia tiene un impacto significativo en varias áreas clave, incluida la rehabilitación, el manejo del dolor crónico, la medicina deportiva, la atención pediátrica, oncológica, neurológica, adultos mayores entre otros.

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