lunes, 10 de junio de 2013

Diario16.- Es uno de los temores más grandes de los hombres cuando llegan a la adultez, incluso algunos caen en depresión. Por ello la disfunción eréctil es un problema que se debe manejar con cuidado, sobre todo a partir de los 40 años, manifiesta el sexólogo y urólogo Máximo Lazo Núñez, quien advierte que más del 50% la padece.
 
“Teóricamente hay una relación directa entre edad y disfunción eréctil: a mayor edad, mayor posibilidad de padecerlo. Claro que esto va a depender del estado físico de cada individuo, incluso se relaciona con problemas de próstata: a mayor sintomatología prostática, mayor posibilidad de falta de erección”, precisó.
 
Según el especialista, las causas son diversas: estrés, tabaquismo, alcoholismo, drogadicción, depresión, colesterol alto, baja hormonal de testosterona, vida sedentaria, problemas neurológicos, diabetes, hipertensión, problemas cardiovasculares, entre otros.
 
Máximo Lazo precisa que la disfunción eréctil puede ser el síntoma centinela o de aviso de problemas de fondo como diabetes, hipertensión y dislipidemia. “Si bien el problema es de los varones, al final viene a ser un problema de la pareja también, pues quedará insatisfecha en una relación sexual. Lo ideal es buscar ayuda ni bien inicie el problema; lo que pasa es que aquí en el Perú, como en Latinoamérica, el tema del machismo hace postergar la búsqueda de ayuda”.
 
“Hay ciertos fármacos, como los antidepresivos, ansiolíticos y algunos tratamientos para la próstata como el Finasteride y Dutasteride, que pueden producir disfunción sexual masculina. El consumo de drogas como cocaína, marihuana y anfetaminas también puede afectar la sexualidad de una manera negativa. Si bien el alcohol en pequeñas dosis puede actuar desinhibiendo al individuo, mejorando su performance sexual, favoreciendo la erección y retardando la eyaculación, en grandes dosis será un depresor del sistema nervioso central, afectando negativamente a la sexualidad”, indicó.
 
El tratamiento dependerá de la causa y muchas veces el paciente mejorará solo tratando el problema de fondo. Por ejemplo, un paciente diabético, hipertenso o dislipidémico mejorará tratando de bajar el azúcar, la presión arterial o las grasas. Muchas veces se indica fármacos facilitadores de la erección, llamados inhibidores de la fosfodiesterasa tipo 5, como son viagra, levitra y cialis.

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