jueves, 26 de diciembre de 2013

Cuatro formas sencillas para relajarse un día cualquiera.
 
 
DESCONEXIÓN
¿Quién no tiene al menos diez minutos al día para no hacer nada? Utilice ese tiempo para, simplemente, pensar en el vacío y olvidarse de todo. Según Andy Puddicombe, ex monje budista y gurú, diez minutos diarios de meditación ayudan mucho a tener paz interior.
 
LLORAR
Sí, llorar. Que fluyan las lágrimas si es que uno, realmente, tiene ganas de llorar.
 
REÍR
Reír es un acto que estimula la liberación de endorfinas, las hormonas del bienestar. Asimismo, pone en movimiento los músculos del tórax, lo cual facilita un mejor ingreso de aire a los pulmones. Soltar carcajadas al día no solo es divertido: es saludable.
 
RESPIRAR
Una propuesta: ser consciente de que uno necesita el aire para vivir. Según el portal Discovery Fit & Health, tener rutinas de respiración profunda ayuda a reducir el estrés. La idea es sencilla: inhalar y exhalar profundamente durante cinco o diez minutos. Sin apuro.

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