martes, 18 de febrero de 2014

Al hacer deporte, eliminas líquidos. Para recuperarte es necesario que te hidrates adecuadamente. Aquí te decimos cómo hacerlo.
 
Diario La Primera.- Es común que al acercarse el verano nos esforcemos más por hacer deporte con el objetivo de vernos y sentirnos mejor, pero como todos sabemos al practicar deporte se eleva la temperatura corporal y para regularla, el cuerpo se vale del mecanismo de sudoración, haciendo que nuestro organismo pierda agua y sales minerales. A su vez, la pérdida de estas sales hace que disminuya el rendimiento físico y que la recuperación sea más lenta.

Si las pérdidas de sudor no son extremas y la actividad deportiva es de corta duración, menos de una hora, la reposición puede ser suficiente con agua, pero en climas calurosos como los que tenemos en verano y si la actividad es muy intensa o sobrepasa los 60 minutos es de vital importancia no solo reponer fluidos sino también electrolitos, es por ello que es importante el uso de bebidas isotónicas o rehidratantes.

Las bebidas isotónicas contienen azúcares y sales minerales a la misma presión osmótica que la sangre. Por su composición, las bebidas isotónicas son mejor toleradas a nivel estomacal y mejor absorbidas a nivel intestinal llegando al torrente sanguíneo sin dificultad, lo que favorece la rápida asimilación de sus constituyentes.

Su aporte de agua evita la deshidratación, y la concentración de hidratos de carbono en un 6%-8% es efectiva para mantener el equilibrio de líquidos, proporcionar energía, reducir la degradación de las reservas de glucógeno, ayudar a mantener estables los niveles de glucosa en sangre y acelerar la asimilación del agua. Si la bebida tuviera menos del 5% de azúcares, sería una bebida de poco valor energético, pero si superara el 10% se retrasaría el vaciamiento gástrico y la absorción de agua, lo que podría provocar diarrea y molestias gastrointestinales.

Puntos importantes a considerar:

- No hay que esperar a tener sed, porque ésta no aparece hasta que se ha perdido un 1 ó 2% del agua corporal, cuando el rendimiento ya ha comenzado a disminuir. Una buena hidratación es fundamental para mejorar el rendimiento físico.

- Lo ideal es tomar la bebida fresca pero no fría (10- 15º C), antes, durante y después del ejercicio y en sorbos de 100-150 ml.

- A mayor sudoración, más agua y sales minerales hay que reponer.


Edwin Girbau
Nutricionista

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