Por: Mariela Luján
Diario Trome.- Cuando nace un bebé, la pareja vive nuevas experiencias como padres y es normal que se preocupen por cumplir esta función de la mejor manera. Sin embargo, también surge un problema que puede costarles la estabilidad de su relación: se olvidan de alimentar el amor.
El segundo paso es que ambos hagan todo lo posible por encontrar un espacio del día en el que puedan estar juntos solos. Esto implica un compromiso de los dos. Si no pueden ir a un restaurante o cine porque deben cuidar al bebé, pueden aprovechar los momentos en los que duerme el infante para organizarse y preparar una cena o ver películas en casa.
Estefany Tenorio, directora del Centro Psicológico Grupos Dinámicos, asegura que es usual que principalmente la mujer quiera ocuparse todo el día del hijo y esto hace que los hombres se sientan desplazados. Peor aún, cuando ellas le restan importancia a la intimidad.
“Todo esto puede hacer que ellos se sientan confundidos y la relación se vuelva vulnerable ya que puede ocasionar ira, resentimiento, indiferencia e infidelidad”, advierte la psicóloga.
CÓMO ALIMENTO EL AMOR
El primer gran paso es hacer que el hombre sienta que cumple un papel importante en el cuidado de su hijo. Pídale a su pareja su opinión para organizar la cuna o el cuarto del bebé, dele pequeñas responsabilidades sobre el pequeño como cambiarlo, bañarlo, etc. Reconocer a la pareja como un apoyo esencial en esta etapa es vital porque si forma parte del trabajo, no se sentirá desplazado sino incluido y podrá comprender mejor su labor.
El segundo paso es que ambos hagan todo lo posible por encontrar un espacio del día en el que puedan estar juntos solos. Esto implica un compromiso de los dos. Si no pueden ir a un restaurante o cine porque deben cuidar al bebé, pueden aprovechar los momentos en los que duerme el infante para organizarse y preparar una cena o ver películas en casa.
No dejen de hacer sus actividades cotidianas. Si estaban acostumbrados a ir a reuniones sociales, vean la forma de seguir haciéndolo. Propicien conversaciones íntimas para hablar sobre cómo se sienten y cómo están experimentando los cambios. Se trata de apoyarse entre ambos, de escucharse juntos.
LA VIDA SEXUAL
El encuentro sexual es la máxima conexión que puede haber entre dos personas que se aman. Está comprobado que un abrazo de 30 segundos aumenta la oxitocina, hormona del amor. Vuelvan a enamorarse. Escríbanse notas con palabras amorosas, dedíquense canciones o tengan detalles. Usen palabras de reconocimiento, como ‘eres indispensable’, ‘eres importante’, ‘te amo’ y traten de lucir bien. Tener un hijo no significa que deban estar desarreglados, al contrario, manifiesten su alegría y amor no solo con su actitud sino con una imagen mejor.
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