jueves, 19 de junio de 2014

Radio Nacional.- Un signo de alerta de depresión como enfermedad en niños y adolescentes es cuando empiezan a haber cambios en otras esferas: conducta irritable, alteraciones en el apetito (comen más o no comen), no pueden conciliar el sueño, bajo rendimiento académico, desgano, aislamiento.

Así lo manifestó July Caballero, psiquiatra de niños y adolescentes del Hospital Honorio Delgado Hideyo-Noguchi, al explicar que los casos de depresión extrema en niños y adolescentes son resultado de que en la actualidad se deja de lado la comunicación por un tema laboral o académico de los padres de familia.
“Los padres tenemos que invertir tiempo en nuestros hijos porque después nos van a pasar la factura y de grandes traerán problemas; y tratar de fomentar la asertividad, la comunicación. Si un hijo encuentra una familia que le da estabilidad, afecto, armonía probablemente no vaya a caer en un problema de depresión o suicidio”, expresó.
En “Estación 103” de Radio Nacional del Perú recomendó además aprender a tratar al adolescente haciéndole sentir que es escuchado, que su opinión importa; y a la vez negociando ciertos temas como la forma de vestir o los permisos considerando también que la sociedad ha cambiado con los años.
“Tenemos que flexibilizar de alguna manera pero hasta cierto límite pero sin llegar a ser permisivos totalmente. Si nos ponemos duros o rígidos con ellos conseguiríamos que se pongan rebeldes, que se escapen de la casa y los pondríamos en riesgo de refugiarse de repente en amistades peligrosas”, expresó.
En otro momento, la Dra. Caballero sugirió a los padres de familia resaltar frecuentemente las características positivas de los niños y adolescentes para levantar su autoestima. “Si a mi hijo siempre le hago las cosas le estoy diciendo indirectamente que no es capaz de hacerlas por él mismo”, anotó.
Al respecto, dijo que es necesario aprender a efectivizar la comunicación y saber expresarse sin agredir a la otra persona.

/MA/

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