Publimetro.pe.- Existe la falsa creencia de que cuando una mujer está embarazada "debe comer por dos". Lo cierto es que durante esta etapa consumir alimentos saludables es de suma importancia, tanto para la salud de la mamá como la del bebé. Generalmente se requieren un promedio de 300 calorías extras, y seguir un régimen de alimentación que incluya frutas, verduras, granos enteros, proteínas magras y grasas saludables. Pero además, hay ciertos nutrientes que merecen especial atención durante el embarazo, pues intervienen en el correcto desarrollo del bebé.
Entérate a continuación de cuáles son:
Ácido fólico: es una vitamina del complejo B (B9) que evita defectos del tubo neural y malformaciones severas del cerebro y de la médula espinal. Las embarazadas requieren 800 microgramos de este nutriente por día, y se encuentra en: cereales fortificados, vegetales de hoja verde, frijoles, cítricos, maní, entre otros.
Calcio: este mineral es necesario para mantener huesos fuertes, tanto de la mamá como del bebé. Además, permite que los sistemas circulatorio, nervioso y muscular funcionen de manera correcta. La mujer embarazada necesita 1000 miligramos de calcio al día. Los lácteos son la mejor fuente de calcio, aunque este nutriente también se encuentra en el brócoli, el ajonjolí, cereales fortificados, salmón, espinaca, entre otros.
Vitamina D: también interviene en la formación de dientes y huesos fuertes. Las embarazadas requieren 600 unidades internacionales (UI) de vitamina D, y la pueden encontrar en pescados grasos como el salmón, en leche, huevos, etc.
Proteínas: son esenciales para el desarrollo y crecimiento del bebé, sobre todo durante el segundo y tercer trimestre. La carne de res, el pollo, el pescado y el huevo son muy buenas fuentes de proteínas. También es posible encontrarlas (aunque en menor cantidad) en frejoles, tofu, productos lácteos y frutos secos.
Hierro: los cambios durante el embarazo hacen que el volumen de sangre se extienda para que el cuerpo se adapte y para que el bebé tenga su propio suministro de sangre. Por esta razón, los requerimientos de hierro aumentan. Los riesgos de no obtener la cantidad adecuada de hierro son: fatiga, anemia, mayor susceptibilidad a infecciones, parto prematuro y bajo peso al nacer. La mujer embarazada requiere 27 miligramos de hierro al día y lo puede encontrar en: carnes rojas, hígado, pollo, pescado, cereales fortificados y menestras (que deben ser acompañadas por un cítrico para asimilar mejor el hierro).
Es importante resaltar que aunque durante el embarazo uno tenga una dieta saludable y completa, no siempre se logra consumir el total de nutrientes que se requieren, por lo que es necesario tomar suplementos nutricionales que contienen las vitaminas y minerales requeridos. El médico tratante deberá recetar estas pastillas, para asegurar que el embarazo se lleve de la forma más saludable.
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