Diario La República.- “Se trata en realidad de un problema que tiene muchas causas. Influyen factores biológicos y ambientales, entre los que destacan las actividades sedentarias, la notable disminución de actividad física y una dieta inadecuada con exceso de calorías”, explica Elizabeth Solís, PhD en Nutrición y autora del programa mexicano estatal “Salud para Aprender”, al referirse al problema de la obesidad infantil.
Por otra parte, la especialista invitada al Congreso de la Sociedad Peruana de Nutrición (SOPENUT) señala que los expertos analizan los factores en otros niveles o dimensiones, como los factores familiares, institucionales, comunitarios, de política pública, entre otros, y concluyen a partir de ello que prohibir no es el camino adecuado, sino educar.
“Es necesaria una reglamentación nutricional específica para ENT (entidades escolares) con el objetivo de buscar una sinergia entre Salud y Educación, para enseñar y establecer no solo normas y lineamientos, sino guías de recomendación y materiales educativos para las escuelas. Una política de reglamentación no debe estar aislada, debe ser un componente más de un Programa Integral de Salud Escolar, que incluya educación y cultura para la salud, el favorecer entornos saludables y seguros, y en el que se detecten oportunamente los problemas de salud de los escolares a través de la capacitación del personal educativo”, agrega Solís.
Surge una pregunta importante y alineada a la coyuntura actual de nuestro país: ¿es realmente una solución a largo plazo para la obesidad en escolares y jóvenes, la prohibición de venta de alimentos procesados en las instituciones educativas? La doctora Elizabeth Solís manifiesta: “En realidad, más que la prohibición de alimentos procesados, lo que se debería prohibir son los alimentos que no favorecen la salud. Y efectivamente sería a largo plazo si se fundamenta en un programa de salud integral con indicadores y evaluaciones externas o resultado de investigaciones científicas”.
“También debemos pensar que si se prohibiesen los alimentos procesados en instituciones escolares, la consecuencia directa sería tal vez peor que el problema que se trata de solucionar, porque no se podría garantizar la inocuidad de los productos al alcance de los niños. Entonces, definitivamente el papel de los alimentos procesados es positivo en general, porque se pueden producir con las cantidades apropiadas de calorías, proteínas, grasas y azúcares y adicionalmente a ello, son inocuos. La solución no está en prohibirlos sino en equilibrar su inclusión en la dieta diaria y orientar a la industria para que explique mejor los contenidos nutricionales y las porciones que ofrece, así como orientar a los consumidores para el consumo suficiente, completo, equilibrado, inocuo y adecuado", asegura la mexicana.
CLAVES
Estrategias. Las que han dado mayor resultado en la prevención de estas enfermedades son aquellas basadas en multicomponentes, que utilizan el modelo socioecológico de intervención.
Agenda. El XII Congreso Peruano de Nutrición “Alimentación saludable desde la niñez para toda una vida saludable” se llevará a cabo el 29, 30 y 31 de mayo de 9 a.m. a 8 p.m., en el Colegio Médico del Perú (Malecón de la Reserva 791, Miraflores). www.sopenut.net.
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