Alimentación para niños en la etapa escolar

Nutricionista del campeonato escolar “Futbolito Bimbo” nos explica qué y cuánto debe comer un menor para mantenerse saludable y evitar la obesidad.

Diario La República.- Cada año que pasa, la obesidad se vuelve un problema más grave para la sociedad. Los niños comen más alimentos poco nutritivos y hacen menos actividad física, lo cual fuera de ser un problema estético, ocasiona consecuencias en la salud a largo plazo, sobre todo si estos malos hábitos empiezan a presentarse a una corta edad.

 

Con la finalidad de tener mayor conocimiento sobre lo indispensable que se debe considerar en esta nueva etapa del año, Brunella Carulla, nutricionista del campeonato escolar “Futbolito Bimbo”, explica qué pueden hacer los padres para armar una lonchera adecuada y nutritiva que complemente su nutrición.

 

“Armemos un plan de alimentación saludable. Esto no significa comer solo verduras y carne (pescado, pollo, etc.), sino por el contrario, debe ser completo, variado y, sobre todo, rico. A esta edad no se recomienda hacer dietas restrictivas y si nuestro niño ya tiene sobrepeso, tenemos que motivarlo a cambiar su estilo de vida, nunca criticarlo por este exceso de kilos ni hacerlos bajar a la fuerza”, señala la especialista.

 

“Negociemos con ellos. A esta edad los niños pueden ser especiales, pero tenemos que saber que todo es cuestión de costumbre. Empecemos incluyendo la mayor cantidad de alimentos en el menú, pero con lo que más les guste. Lo ideal es sentarnos con ellos y planear: un día comemos tu plato favorito, otro el mío y otro el de papá. Lo mismo con los desayunos y, sobre todo, con las loncheras; no sirve de nada que sea sana y balanceada si es que van a dejar todo”, agrega Carulla.

 

Sobre cómo saber qué y cuánto deben comer, la nutricionista revela que esto varía según el género, la edad y el grado de actividad física. Los preadolescentes, niños entre 9 y 12 años de edad, quienes están entrando a la etapa de pubertad y el crecimiento es acelerado, necesitan entre 1600 y 2600 calorías al día; las niñas entre 1600 y 2200, y los niños entre 1800 y 2600 calorías.

 

“Sabemos si están consumiendo la cantidad de energía que su cuerpo necesita si están ganando peso a un ritmo saludable; es decir si están ganando peso de acuerdo a su crecimiento y se mantienen siempre en un rango adecuado para su talla. Aproximadamente es 4.5kg por año, pero esto también puede variar de acuerdo a la contextura y genética de cada niño”, asegura Brunella.

 

Una vez cubierto el aporte necesario de calorías –prosigue la vocera de Bimbo–, es importante fijarnos de dónde vienen. Debe estar claro que no es lo mismo consumir 100 calorías de caramelos que 100 de pescado. Es cierto que ambos aportan la misma cantidad de energía, pero el primero no nutre y fomenta las caries, mientras que el segundo tiene proteína, grasas buenas, minerales, vitaminas, entre otros beneficios.

 

Claves

VARIEDAD. Si cubrimos el requerimiento de energía mediante una dieta balanceada, utilizando la mayor variedad de alimentos posibles y en las cantidades adecuadas, estaremos cubriendo el requerimiento de proteínas y minerales.

 

EJERCICIO. Comer sano es importante, pero representa solo el 50% de lo que debemos hacer. La otra mitad deberá estar acompañada de cualquier actividad física: bailar, patinar, nadar, etc.