sábado, 11 de junio de 2016

Por: Milagros Laura
Trome.pe.- Cuando hablamos del abuso de cirugías plásticas es imposible no recordar al ‘rey del pop’ Michael Jackson, quien terminó con una diminuta nariz luego de 11 operaciones, según contó su cirujano. Y es que el deseo por la perfección, en algunos casos, llega a ser extremo. Ya no son solo los famosos quienes recurren al quirófano, hoy cada vez más personas que se someten a cirugías estéticas sin límites.

UN TRASTORNO

La médico cirujano María del Carmen Martínez Velezmoro, de la Clínica Martínez, explica que, muchas veces, la adicción a las cirugías estéticas está íntimamente ligada a un trastorno de la personalidad.
Es responsabilidad del especialista orientar y explicarle al paciente que, cuanto más cambios sufra su cuerpo (por las cirugías), más insatisfacción tendrá.

TIPOS DE PACIENTES

Existen dos. Está aquel que busca retoques que lo ayuden a mantenerse joven, delgado o corregir imperfecciones, procurando no perder su apariencia natural.

Y el obsesivo, que se realiza una y otra vez una cirugía en la misma parte del cuerpo o rostro, tratando de conseguir resultados que traspasen lo estético y, muchas veces, sin importarle que al final estos luzcan falsos.

“A la clínica han llegado mujeres, que han pasado por tres liposucciones y sin tener una gota de grasa en la cintura quieren volver al quirófano. Uno como médico se niega, pero estas personas obsesivas buscarán un cirujano que acepte su demanda, poniendo en riesgo sus vidas”, advierte la experta.

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