lunes, 14 de abril de 2014

Por: Mariela Celis
 
Diario Trome.- ¿La excesiva preocupación en el trabajo genera buenos resultados? No siempre es así. La ansiedad desproporcionada, a diferencia de la eficiencia, solo causa estrés, estado emocional considerado el mal el siglo XXI ya que da lugar a múltiples enfermedades.
 
El doctor Tomás Borda, del programa ‘Doctor TV’, explica que episodios de mucha tensión producen que las glándulas suprarrenales en el interior del organismo segreguen una sustancia llamada cortisol, ‘la hormona del estrés’. Esta puede generar efectos subjetivos (agresividad), conductuales (imperiosa necesidad de comer o beber alcohol de manera excesiva) y cognoscitivos (hipersensibilidad a la crítica, así como bloqueo mental, falta de concentración y dificultad para la toma de decisiones).
 
“Incluso puede provocar ‘Burnout’, estado de fatiga física y mental que se acompaña con tristeza o depresión, molestias digestivas crónicas, dolor de cabeza, deseo de abandonar la sociedad y alejarse del trabajo”, indica el especialista durante la campaña de bienestar social en el hotel Westin.
 
NO ELUDIR EL PROBLEMA
Como todo problema, es mejor aceptar que se padece de estrés en lugar de eludirlo. “Se debe afrontar esta condición teniendo el control de uno mismo. Las posibilidades de tener una vida sana son infinitas conforme las personas traten de salir del cuadro de ansiedad. Por ello, jamás se debe esperar que el estrés se vuelva crónico”, advierte.
 
CONSEJOS PRÁCTICOS
 
1. Antes de ir al trabajo, mida su tiempo. Levantarse tarde e ir contra el reloj, es empezar el día con tensión.
 
2. Si tiene muchas cosas por hacer, elabore una lista de responsabilidades diarias que pueda cumplir antes de salir del trabajo. Priorice.
 
3. Organice su lugar de trabajo. Si está desordenado, inconscientemente influirá en su estabilidad mental.
 
4. Trabajar sin parar no es bueno. Tome un descanso para levantarse, caminar y hacer un simple ejercicio de estiramiento.

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