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El verano aún no
se termina pero las clases ya comenzaron, por lo que hay que tomar medidas
extras para prevenir emergencias médicas en el colegio.
La alarmante cifra no debe pasar desapercibida,
especialmente por los padres de familia quienes, con el inicio del año escolar,
deben confiar durante gran parte del día en las instalaciones educativas donde
asisten sus hijos. Por tal motivo, Pacífico Seguros, de la mano con la red de
clínicas SANNA, brinda algunas recomendaciones para evitar emergencias por el
calor en el colegio.
Protección ante todo
La Dra. Lucero Sáenz Llanos, pediatra de SANNA
Clínica San Borja, señala que la protección de los niños en época escolar, debe
ser un trabajo conjunto de los padres con los centros educativos, por ello es
importante que los profesores también colaboren con ciertas pautas a favor de
la salud de los menores.
Por ello, la doctora recomienda:
1. Armar un kit de protección: Este debe contar al menos con bloqueador solar, botellas de
agua (de preferencia dos botellas de 500ml) y, si es posible, gorros y polos
con protección UV.
2. Verificar las instalaciones del colegio: Gran parte del día de los niños está destinado a permanecer en clases,
por tanto las escuelas deben preparar sus instalaciones para que ellos no
sufran por exceso de calor. Los salones necesitan estar ventilados, es
importante que existan toldos o espacios techados en los patios, bebederos y
agua para refrescarse a la mano, entre otros.
3. Usar uniforme de verano: Es importante que el colegio implemente un uniforme más ligero o, en todo
caso, permita que sus alumnos asistan con ropa apropiada en estos días.
4. Durante las clases de educación física: Dado el esfuerzo que harán los niños (más aún si este se realiza en zonas
como patios o al aire libre donde haya exposición al sol), los profesores y
padres deben recalcar a los menores la importancia de usar bloqueador solar
antes empezar con la clase. Además los escolares deben usar ropa ligera, hacer ejercicios
cortos, y tomar descansos para retomar el aliento, protegerse del sol e
hidratarse debidamente.
5. Profesores capacitados ante emergencias: si alguno de los niños presentara malestares que le impidan continuar
con las clases, los maestros deben poder detectar si es una emergencia para llevarlos
a un centro médico.
6. Niños protegidos: Pacífico
Seguros recuerda que los padres deben confirmar con la entidad educativa si
cuentan con algún tipo de seguro ante accidentes personales para los escolares.
Este debería ser adquirido con la matrícula (en algunos casos lo asume el
colegio y en otros los padres) y, dependiendo del tipo de plan, también puede
protegerlo fuera de las instalaciones. Asimismo, cabe recordar que los niños
también están protegidos ante estas emergencias si sus padres cuentan con
seguros de salud o un plan EPS y los han inscrito debidamente.
Para finalizar, recordemos que un niño no sufre las
mismas consecuencias del sol que un adulto. Las altas temperaturas pueden
causar deshidratación, dolor de cabeza, malestar general e incluso golpes de
calor. Estos efectos generarían que el menor no pueda mantener la concentración,
dificultando el proceso de aprendizaje y, en casos más graves, complicarían
incluso su salud.
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