Salud en Casa.- A días de culminar el año escolar 2020 y de cara a planificar una educación semipresencial para el próximo año, es importante realizar una retrospectiva de lo que fue la educación virtual en el Perú.
Para César Valderrama, experto en
educación digital de Santillana, la decisión de continuar con las clases
escolares de manera virtual fue una respuesta rápida ante la emergencia
nacional que atravesaba el país para no perder el año escolar.
Este escenario trajo consigo una
nueva normalidad a la que poco a poco se han ido adaptando los colegios, los
docentes, los alumnos y los padres de familia; sin embargo, esta nueva realidad
significó un gran desafío. Fue así como los centros educativos iniciaron la
búsqueda de plataformas digitales que les ayude a sobre llevar la enseñanza
escolar a distancia.
Sistema educativo integral, la gran solución para la educación
peruana semi presencial
En algunos países como Colombia,
Chile y México desde hace seis años ya se venía trabajando en un modelo
educativo a distancia. Sin embargo, en Perú esto no fue entendido completamente
por los colegios y seguían con su paradigma de seguir haciendo todo en
presencial, manifestó el experto.
“En marzo, cuando decretaron el
Estado de Emergencia, los colegios recién empezaron a optar por adquirir unas
plataformas improvisadas, cuando en realidad era necesario todo un sistema
educativo digital con recursos desde el contenido hasta la evaluación validados
dentro del enfoque por competencias que exige el currículo nacional”.
“Esto, generó toda una realidad
nunca explorada sobre el rol que debían asumir docentes, alumnos y padres, y el
cual costó mucho asimilar a todos “sostuvo.
Asimismo, los directores en muchos
casos tuvieron que enviar las computadoras del colegio a los profesores, ellos
subir el ancho de banda de internet en sus domicilios, destinar un ambiente de
la casa para las clases y los padres crear un ambiente de estudio para los
hijos, manifestó.
De igual manera, Valderrama
refiere que en el mercado existen diversas plataformas que ayudan a dictar
clases de manera virtual. Sin embargo, muchas de estas no cuentan con los
materiales requeridos para las clases, ni con las herramientas necesarias para
una buena comunicación docente-alumno. En otros casos, los educadores se vieron
obligados a usar correos electrónicos para la entrega de las actividades o el
uso del WhatsApp para tener contacto con los alumnos.
Según el experto, plataformas con
gran experiencia en otros países como, por ejemplo, Compartir de Santillana,
que cuenta con un amplio abanico de contenidos digitales que dinamizan el aprendizaje
de manera lúdica, permite al educador cumplir con el esquema establecido por el
Ministerio de Educación y que, además, ayuda a mantener una
comunicación más fluida entre el alumno y el profesor con total seguridad,
se muestran como una solución inmediata para el año escolar a distancia y se perfilan
como la nueva solución para el 2021.
Esto, debido a que el 2020 nos
dejó las siguientes lecciones.
1.
En
los colegios. Las enseñanzas que se rescatan son que la transformación
educativa depende en su mayoría de las decisiones de los directivos. El futuro
es incierto, por ello, es necesario contar con un plan estratégico que
involucre a la tecnología.
2.
En
los docentes. Aprendieron a salir de la
zona de confort, rompieron el miedo y se reinventaron desde sus limitaciones,
pero no se rindieron aun cuando sabían que ese terreno no era de ellos, sino de
los “nativos digitales.”
3.
En
alumnos. Entender que la tecnología puede ser usada también como un medio
de enseñanza y no solo como una herramienta que ayuda a la distracción y diversión.
Se agilizó también la autonomía en el aprendizaje.
4.
En
padres de familia. Aprendieron a asumir un rol que
por mucho tiempo se lo dejaron solo a los profesores. Tuvieron que reconocer
que ellos también juegan un papel muy importante en este proceso y que son los
que deben motivar, animar y acompañar durante la educación de sus hijos.
Principales mitos educativos que quedaron en el olvido
Según el experto de Santillana
Perú, el principal mito fue que los estudiantes no aprenderían, que el profesor
tendría menos participación y que la escuela tendría menores gastos “Todo esto,
luego de meses de confinamiento nos dimos cuenta que no es verdad, que el
aprendizaje se da siempre y cuando el alumno desee aprender y hayan condiciones
de respeto a los tiempos y ambientes, que el profesor triplicó su tiempo y la
mayor parte se dedica a las clases virtuales, en muchos casos olvidando a su
propia familia y los colegios siguieron trabajando a pesar de la amenaza de la
reducción de pensiones”.
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