Las dos horas inmediatas al nacimiento son decisivas para despertar en el recién nacido su interés por lo que le rodea y establecer el vínculo que más tarde lo ayudará a mamar.
Salud en Casa.- El Programa Nacional Cuna Más del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis) comparte con las madres, padres y cuidadores principales cinco Consejos de Cuna para abordar un tema que sin duda es de mucho interés para aquellas mamás que están en la dulce espera o aquellas que han dado a luz recientemente: la lactancia materna.
Si bien la lactancia materna es un tema sumamente amplio, que durante generaciones ha estado sujeto al tabú o a mitos que no necesariamente son verdad, es importante empezar recalcando que, ante todo, dar de lactar es un acto de amor, pues ese contacto, esa cercanía entre tu pecho y la cabeza del bebé contribuye favorablemente a la relación que establecerás con ella o él, ya que estimula la secreción de la hormona oxitocina, la cual facilita el flujo de la leche y exalta las sensaciones de afecto y amor.
De hecho, muchos pediatras y otros profesionales de la salud en el mundo coinciden en que ese contacto, ese primer roce de tu piel con la de tu bebé, dentro de las dos horas inmediatas al nacimiento, son decisivas para despertar en el recién nacido su interés por lo que le rodea y establecer el vínculo que más tarde lo ayudará a mamar.
Por todo esto, abordamos los aspectos más básicos de la lactancia, que son las posturas más recomendadas para dar de lactar a nuestra niña o niño:
Consejo 1. La postura de cuna. Probablemente la más utilizada para la lactancia materna. Para lograrla, puedes ayudarte por una almohada o cojín suave, sobre el que podrás recostar a tu bebé. Recuerda que para asegurar la cercanía de tu cuerpo con el de tu bebé puedes alinear su oreja, hombro y cadera con tu pecho. No olvides en todo momento mantener el contacto visual con el o la bebé.
Consejo 2. La postura acostada. En este caso, recuéstate sobre la cama o superficie reclinable que tengas y, con cuidado, coloca a tu bebé de barriga sobre tu pecho, procurando que su boca quede cerca del pezón.
Consejo 3. La postura caballito. Si tu niña o niño ya puede sentarse por sí solo, puedes probar esta postura, sentándole sobre tu muslo y colocando tu pecho a la altura de su boca para facilitar el agarre y succión de una manera cómoda. Recuerda sostener con cuidado su cabeza mientras está lactando.
Consejo 4. La postura acostada a la inversa. En este caso, es necesario que recuestes a tu bebé sobre una almohada, cojín o colcha suave, que le permita mantener ligeramente levantada su cabeza. Tú deberás recostarte a su lado, con tu cabeza en el sentido al que apuntan sus pies, de manera que tu pecho quede a la altura de su boca. Para tu comodidad, apoya tu cabeza sobre una de tus manos, usando tu brazo como soporte, y acomoda tu pecho sobre la almohada, cojín o colcha en la que se apoya tu bebé.
Consejo 5. La postura de cuna acostada de lado. Para esta postura, debes recostarte y colocar la cabeza sobre una almohada cómoda. Luego, flexiona la cadera y las piernas hacia un lado, y recuesta a tu bebé sobre tu pecho, sosteniéndole con tus brazos. Cuando quieras cambiar de seno, simplemente gira tu cadera y piernas, y reacomoda a tu bebé como corresponde.
Esperamos que estos consejos les hayan sido de utilidad y que los puedan poner en práctica en casa. ¡Hasta la próxima!
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