Peru21.pe.- El intenso calor que se viene registrando en nuestro país ha provocado que muchas personas que sufren de migraña incrementen la severidad, duración y frecuencia de sus crisis; además de aumentar las cifras de esta enfermedad. En el Perú hay más de 3 millones de peruanos que sufren este mal, informaron especialistas del Instituto Peruano de Neurociencias (IPN).
“La estación de verano incrementa tanto la gravedad como el número de crisis de migraña en estos pacientes, debido al aumento de la temperatura corporal, del calor ambiental, la exposición al sol y la alteración de los ritmos biológicos; además existen otras circunstancias que pueden provocar cefaleas en verano, como los cambios de temperatura generados por el aire acondicionado o la ingesta de alimentos especialmente fríos”, declaró David Lira Mamani, neurólogo y director del IPN.
El especialista recomendó que para prevenir el aumento de las crisis de migraña durante el verano se tiene que evitar la exposición prolongada al sol cuando se acuda a la playa o la piscina y de preferencia colocarse debajo de sombrillas; usar sombreros o gorros, lentes oscuros con protección ultravioleta; y vestir ropa cómoda y de colores claros.
“Consumir comidas ligeras e hidratarse en forma abundante a lo largo del día, evitar o reducir la ingesta de bebidas alcohólicas, en especial la cerveza y el vino tinto, desencadenantes frecuentes de crisis de migraña; y tratar de no modificar los horarios habituales de trabajo, estudio, comidas y sueño, y sobre todo no olvidar tener siempre a la mano su medicamento para crisis de migraña”, recomendó el especialista.
Por su parte, el neurólogo Nilton Custodio Capuñay señaló que muchas personas padecen migraña en alguna de sus formas, afectando a las mujeres en mayor proporción que a los hombres, siendo las edades de presentación más frecuentes entre los 20 y los 50 años de edad, generando numerosos problemas por menor productividad en el trabajo, menor rendimiento en los estudios y ausentismo en las personas que la padecen.
Custodio Capuñay agregó que la migraña es una enfermedad crónica, con episodios frecuentes de cefalea asociada a mareos, náuseas, fotofobia (molestias con la luz), sonofobia (molestias con los sonidos), tiene enormes costos económicos directos por atención de salud y compromete su vida a nivel laboral, familiar y social.
“La migraña, pese a ser una de las enfermedades neurológicas más frecuentes, no es adecuadamente tratada, debido a que los pacientes son evaluados generalmente por médicos no neurólogos; sin embargo lo que más influye en el inadecuado tratamiento de la migraña es la automedicación, ya que muchos de los pacientes consumen fármacos sugeridos por los vendedores de las farmacias, familiares, amigos o compañeros de trabajo”, concluyó.
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