Estos hechos se realizan a plena luz del día sin que las autoridades de la comuna intervengan, lo cual otorga impunidad a los choferes de los camiones y empresas constructoras.
A pesar de las denuncias periodísticas en el distrito de San Miguel, la municipalidad sigue permitiendo el arrojo de desmonte pese a las sanciones y notificaciones remitidas por la Capitanía de Puerto y al proceso de investigación seguido por la Fiscalía Ambiental de Lima Metropolitana.
“Estos hechos se realizan a plena luz del día sin que las autoridades de la comuna intervengan, lo cual otorga impunidad a los choferes de los camiones y empresas constructoras que arrojan sus escombros y residuos en lugares no autorizados”, manifestó Guillermina Blas, presidenta del Frente de Defensa del Mar y Medio Ambiente del Callao (FREDEMAR).
De acuerdo a la dirigente, la municipalidad de San Miguel argumenta que cuenta con un convenio con el Ministerio de Transportes y Comunicaciones y autorización de la Costa Verde para ejecutar su proyecto, pero no hay proyecto y todo es informal.
“Estos trabajos se estarían realizando sin contar con los permisos correspondientes ya que la Capitanía de Puerto del Callao ha manifestado que como autoridad marítima no se ha autorizado a la Municipalidad de San Miguel la ejecución de obras al borde costero del distrito”.
Por ello Guillermina Blas invoca al Ministerio del Medio Ambiente y a la OEFA, que intervengan en esta situación y que sus procuradores inicien las acciones ilegales que correspondan para detener este atentado contra el mar de Lima y Callao.
“Se tiene conocimiento que estas obras de no tener autorización alguna , tampoco cuentan con estudios técnicos de hidrografía , batimetría y otros que determinen el impacto de las modificaciones que están causando en el ecosistema marino costero, ya que para este tipo de proyectos se debe ejecutar un estudio de impacto ambiental el cual no ha sido elaborado”, agregó.
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