martes, 6 de mayo de 2014


Los asmáticos  o aquellos que tienen problemas bronquiales definitivamente el aire acondicionado los perjudica, complicándoles con un cuadro de bronquitis a repetición.

Salud en Casa.- Ahora que conmemoramos el Día Mundial del Asma, muchos que trabajan en oficinas recurren al aire acondicionado, sin saber que pueden sufrir de problemas respiratorios en especial los pacientes asmáticos, quienes pueden ser víctimas de una crisis, alertó  la Dra. Doris La Chira, neumóloga del Portal “Salud en Casa”.

“El aire acondicionado es responsable de la mayoría de las infecciones respiratorias como faringitis, bronquitis, neumonías, sobre todo los resfriados nasales y las faringitis son los más frecuentes debido a las bajas temperaturas de estos equipos , sequedad del ambiente y el cambio brusco de temperatura en  pacientes alérgicos y asmáticos quienes son los más sensibles”, advirtió.

Según la especialista los asmáticos  o aquellos que tienen problemas bronquiales definitivamente el aire acondicionado los perjudica, complicándoles con un cuadro de bronquitis a repetición, dando lugar al riesgo de complicarse con cuadros de crisis asmática  e incluso una neumonía que puede poner en riesgo sus vidas”.

“Las personas que tienen que tener cuidado con el uso del aire acondicionado son aquellas que fuman en exceso, sufren de alcoholismo, laboran en deficientes condiciones de trabajo, padecen de  hipertensión arterial , son diabéticos, tienen enfermedades pulmonares, hepáticas, renales e inmunocomprometidos. Estos pacientes deben de tener un buen estilo de vida limpieza, con una óptima alimentación, cuidados y controles periódicos, e incluso deben vacunarse contra la gripe y neumonías”, indicó.

Para Doris La Chira, el sistema de aire acondicionado debe tener mantenimiento, mediante una  desinfección adecuada en forma periódica para evitar la contaminación de todo el aire que se respira en el  ambiente donde está funcionando.

“Esto debido porque en estos lugares contaminados es donde se  incrementa el desarrollo  de bacterias y hongos , incrementando la posibilidad de que las  personas sufran de enfermedades como neumonía u otras patologías relacionadas por la contaminación e irresponsabilidad de las autoridades que permiten el uso sin control”, agregó.

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