Cuidados en manos y pies

En Lima, los casos de hongos están ligados al incremento de los niveles de humedad. Identifíquelos y no deje que avancen.

        

Julia Pancorbo,
Dermatóloga del Portal Salud en Casa

 

Suplemento Domingo.- Los elevados índices de humedad que se registran en Lima son un desencadenante de hongos en manos y pies, y están asociados al 60% de casos presentados en la capital.

 

 Hay varios tipos de hongos, como los dermatofitos y las levaduras, que se detectan cuando se hace un diagnóstico en base a un estudio microbiológico. En la mayoría de casos es el mismo hongo que se presenta en varias zonas, en la interdigital (entre dedos), a nivel de la planta de los pies, y a nivel inguinal (entre las piernas). 

 

Muchas personas se contagian en centros donde no se tienen los debidos cuidados de bioseguridad. Es decir, donde no esterilizan bien el material, sobre todo las limas de uñas, y por eso el contagio se da de cliente a cliente. Los instrumentos deben ser estériles, y en el caso de las limas, por ser desechables, deben usarse nuevas en cada paciente o cliente.  

 

El cortaúñas debe ser de uso personal. Si se sufre de hongos, el cortaúñas debe cambiarse periódicamente, limpiarse antes de usar y utilizarse solo en uñas que estén afectadas, no en uñas sanas. Dentro de una familia, cada uno debe tener su propia toalla de manos y pies, sus propias limas y cortaúñas.

 

En el caso de las manos, los hongos se presentan más en mujeres, porque continuamente llevan las manos húmedas, debido a que son las que realizan con más frecuencia los quehaceres de la casa. También hay problemas por usar guantes de manera indebida, sin cuidar que estén secos. 

 

Durante un tiempo, los hongos pasan desapercibidos, sobre todo en invierno, cuando tenemos el pie cubierto y no nos damos cuenta que la infección va creciendo. No hay que esperar a que el hongo comprometa todas las uñas para ir al dermatólogo, ya que de ocurrir esto se necesitará un tratamiento largo, con controles mensuales por un período de cinco a seis meses.

 

 El medicamento que se recete dependerá del tipo de hongo. Para esto se hace un examen microbiológico, y en función a ello se empieza a tratar la uña. Se deben emplear antimicóticos sistémicos, los cuales se suministran vía oral principalmente, y por vía tópica a través de lacas y cremas.

 

Tenga en cuenta

 

Los diabéticos son más susceptibles a desarrollar hongos. Se recomienda que eviten usar medias sintéticas, y que guarden los zapatos en bolsas de papel, ya que el plástico genera más humedad y facilita el crecimiento del hongos.