lunes, 30 de junio de 2014

Por: T. Paredes
Diario Trome.- La mordisco que el jugador uruguayo Luis Suárez le hizo al italianoGiorgio Chiellini ha puesto sobre el tapete un serio problema de control emocional, que se arrastra desde la niñez. Según el psiquiatra Víctor Alcázar, los padres de familia deben observar las reacciones de sus hijos desde muy pequeños. Esto, para evitar alguna alteración en su personalidad.

“Si el niño presenta reacciones agresivas, como patear, morder o golpear ante una situación extrema, lo primero que se debe hacer es castigarlo. No con golpes, sino quitándole algo que él disfrute como la televisión, salir al patio, etc. No se debe dejar pasar una actitud violenta”, recomendó.
Indicó que el castigo debe ser de inmediato, pues el menor tiene que relacionar su mala conducta con el castigo de manera inmediata. “No podemos esperar para castigarlo, porque si no usted será muy permisible y el menor creerá que su acción no ha sido tan grave”, dijo.
Agregó que si este tipo de conducta continúa, lo mejor será llevarlo a un especialista para que trate el descontrol emocional.
Sobre el caso de Suárez, el psiquiatra del Hospital Nacional de Salud Mental ‘Hermilio Valdizán’ dijo que el jugador sufre de una alteración de la personalidad y no es capaz de soportar el estrés.
Sin embargo, dijo, es consciente de lo que hace porque busca justificar su acción. “Tiene un trastorno del control de los impulsos, rasgos disociales. No es la primera vez que hace algo así. Lo bueno es que ha sido sancionado rápidamente”, precisó.

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