Intolerancia a la lactosa

Es una afección en el intestino delgado

 

Por: Alexandra Flores P. 

 

Diario El Popular.- La intolerancia a la lactosa ocurre cuando el intestino delgado no es capaz de digerir la lactosa, un tipo de azúcar que se encuentra en la leche y otros productos lácteos.

La razón de este problema es que el intestino no produce suficiente cantidad de enzima lactasa.

 

“Los síntomas más comunes de una persona intolerante a la lactosa varían según cada persona. Es común que hayan gases, dolor abdominal, diarreas, vómitos, de 30 a 120 minutos después de consumir leche o derivados”, explicó  Haydée Morales, asesora en nutrición de Bimbo Perú.

 

¿Qué debo hacer?

 

1). Lee las etiquetas nutricionales de los productos que consumes y verifica que no tenga lactosa.  

2). Elige en los desayunos  leches que digan en la etiqueta “deslactosada”. 

3). En caso de consumir algún producto con lactosa como la leche, procura hacerlo en porciones reducidas. 

4). Evita el consumo de yogur, quesos, mantequillas y  postres procesados.

5). Lleva un control diario de la cantidad de lácteos que consumes y así sabrás cuántas  dosis tolera tu organismo, sin padecer molestias.  

6). Consulta con tu médico sobre las medicinas que tomas. Algunos medicamentos llevan lactosa. 

7). Ingiere yogures con cultivos vivos. Suelen ser bien tolerados por el organismo. 

8). Si te preocupa la reducción de calcio por no consumir leche, incluye en tu dieta diaria brócoli, acelgas, ajonjolí, huevos, así como cereales.

9). Incluye en tus almuerzos pescado, carnes, huevos y menestras para reemplazar las proteínas derivadas de los lácteos.        

 

Alivia los síntomas                   

 

Ningún tratamiento actual puede recuperar la actividad de la enzima lactasa en el intestino,  cuando su causa es de origen genético.

 

Sin embargo, es fácil de tratar, los síntomas pueden aliviarse con medidas dietéticas adecuadas como la reducción de una parte o total del consumo de lácteos como leche, queso y yogur. Eso debe ser indicado por un especialista médico o nutricionista.